¿Hay alguien a quien le gusten los días fríos de lluvia?
Aunque la lluvia sirve para regar los campos, llenar los pantanos para que tengamos agua corriente..., también fastidia mucho.
Pues aquí va un ejemplo de un día frío de lluvia;
Era el último día del primer semestre,¡ por fin !
Como todos los años teníamos que hacer el Cross de Navidad, una carrera por la pista de cross que da la vuelta al patio del recreo. Todos estábamos muy emocionados, pero este año no pudimos participar.
Ya por la mañana hacia mucho frío y el cielo estaba gris. Pero cuando estábamos en el colegio se puso a llover, por eso no participamos en el cross ni tampoco salimos al patio. Por lo menos pudimos hacer todo lo demás, cantamos villancicos en el gimnasio, hicimos el amigo invisible y montamos una pequeña fiesta en clase con comida y música.
Al salir a la calle era un caos, atascos de coches que venían a buscar a sus hijos e hijas, montones de madres y padres con paraguas enormes que no dejaban ver nada... Yo intentaba ver si mis padres me habían venido a recoger, pero no les veía por ninguna parte.
Como no tenia paraguas me puse la capucha de la chaqueta y me fui a casa. Pero cuando llegue no había nadie. Así que me tuve que esperar y entonces llegaron mis padres y menuda sorpresa cuando les pregunte porque no me habían ido a buscar a la escuela si estaba lloviendo. Entonces dijeron que habían ido a buscarme pero llegaron un poco tarde y yo ya me había ido.
Bueno fue una mañana un poca catastrófica por culpa de la lluvia, pero aun así ¡estuvo bien!
Mar Forcadell
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